2022-
Tres horas.
Una muestra de los alumnos del taller de pintura de Constanza Delfino.
Bastón del Moro, Córdoba Capital.
Tres horas es lo que dura la clase semanal que tenemos de taller.
Tres horas son las que necesito para empezar por acabar con el mito de que para pintar hay que nacer con un talento especial para la pintura. No es cierto. Pintar es como cualquier otra cosa, es algo que se puede aprender, que hay que practicar y que es divertido. No significa que sea fácil, pero es divertido. A través de cuestiones técnicas, procedimientos, consejos para aplicar materiales y color, conociendo otros artistas, sostengo que “pintar no es nada más que conseguir que un líquido con color se adhiera donde unos quiere”. Poner la pintura sobre el soporte es el primer paso, el siguiente es conseguir que se quede donde uno quiere. Y esa brecha entre el primer paso y el segundo es el que intentamos acotar a lo largo de las prácticas y ejercicios, atravesando algunos miedos, vergüenzas y frustraciones. Muy valientes quienes son capaces de animarse, probar y exponerse en este espacio, de permitirnos ser vulnerables.
Bienvenidos a este recorrido de prácticas, aciertos y errores que nos llevaron a aprender a pintar, compartir y superarnos.
Siempre hago hincapié en que la desinformación nos hace ignorantes, el conocimiento nos hace libres! Yo feliz de enseñarles mis saberes y agradecida a todos los que son y formaron parte de mi camino y taller. Infinitas gracias por seguir enseñándome a enseñar.
Lic. Constanza Delfino
